Aromas que no podrás encontrar en ninguna parte del mundo, gente amable que ofrecerá sus servicios con una sonrisa siempre y querrán ser lo más útiles para el foráneo, familias caminando por las empedradas calles de la ciudad, admirando los deslumbrantes colores de Oaxaca en el Centro Histórico de su capital, que son cautivadores, con una serie de tonos terrosos, anaranjados y amarillos brillantes ofrecen una imagen mágica, cálida y con esencia a las fiestas clásicas de la zona. Los edificios, en tonos de azul, naranja, verde lima, ocre, malva y rosa con ventanas cubiertas de hierro forjado, crean una elegancia de estilo español.
En el borde de la ciudad se encuentra Monte Albán, una antigua y poderosa ruina arqueológica, construida cinco siglos antes del nacimiento de Cristo. Su tesoro, descubierto en una tumba subterránea, comprende cientos de artesanías como pulseras, collares, narigueras y pendientes de oro y jade. Además de éste centro prehispánico, podrás observar varios artefactos en conventos y monasterios erigidos en el momento de la conquista española en el siglo XVI, que te proporcionan una visión del pasado precolombino de Oaxaca.
Uno de los atributos más importantes de la región es el chocolate, es otro tesoro precolombino. Durante siglos, esta grandiosa mezcla ha deleitado los paladares de culturas prehispánicas como los mayas y aztecas. Entrar en la calle del chocolate y no comprar algo de esta hermosa pasta para crear bebidas, es algo imperdonable. Lugar de donde proviene la famosa marca Mayordomo, el mayor productor de chocolate de la ciudad, y del Mercado Juárez, un mercado enloquecido, el penetrante aroma del chocolate, se mezcla con un exótico cóctel de flores, frutas y pan recién horneado.
Entrar en el Mercado Juarez poco iluminado y deambular por estrechos pasadizos, donde las frutas y verduras más comunes (pero exóticas para un foráneo) como papayas, guanábana, granadas, mangos y plátanos en grandes montones, crean torres de color y aromas contrastantes.
En la matriz del Mayordomo, podrás observar como los locales van y esperan por una molienda especial para cada uno, donde ellos mismos podrás agregar el ingrediente que deseen en su mezcla. Muchos sacos de granos de cacao a la entrada del mercado te dirán cuál es el lugar ideal para ello.. Alrededor de 115 molinillos de chocolate en diferentes partes de la ciudad atienden diariamente las necesidades de los oaxaqueños, moliendo y mezclando la receta única de cada familia.
Muchas más cosas podrás encontrar en este enigmático estado, donde en cada aventura conocerás mucho más de las costumbres arraigadas en los locales y querrás aprender más y más sobre ellos. Los lugares turísticos de Oaxaca esperan por tí y tus seres queridos, para ser parte de su vida y llenarlos de felicidad. Busca llegar en época lejana a los festivales, si gustas evitar el bullicio, pero si es una de las cosas que te atraen a este lugar, asegúrate de reservar con tiempo tu hospedaje, ya que se terminarán los lugares de manera frenética. De ahí en fuera, solo disfruta de tu viaje, que seguro no te arrepentirás jamás.